Las lesiones más comunes

Según datos de la Organización Mundial de la Salud –OMS- los accidentes de tráfico causan alrededor de 127.000 muertes y 2,4 millones de heridos al año en Europa. De hecho, es la primera causa de muerte de niños y jóvenes de entre 5 a 29 años.

Las lesiones producidas por un accidente de tráfico varían mucho dependiendo del vehículo y de la condición de la víctima.

Así, los peatones y ciclistas representan alrededor del 30% de los involucrados en accidentes. Y las consecuencias son casi dos veces más graves para los peatones que para los ocupantes de automóviles.

En estas circunstancias también influye la edad de la víctima. Por ejemplo, en lo que se refiere a menores de edad, la lesión más frecuente en los bebés hasta los 2 años es de cuello, entre 2 y 4 años la cabeza es la parte más débil porque las vértebras aún no son lo suficientemente fuertes. Y de 4 a 10 años el mayor riesgo se refiere a las hemorragias internas en el abdomen porque los órganos aún no están lo suficientemente fijados a la estructura abdominal.

En lo que se refiere a los adultos ocupantes de un automóvil, sin duda, la lesión más común es el esguince cervical. El movimiento repentino de la cabeza hacia adelante y hacia atrás produce un latigazo, sobre todo cuando el vehículo recibe un golpe por la parte trasera. El tratamiento suele aconsejar el uso de collarín durante un tiempo.

Los ciclistas y los motoristas tienen otro tipo de lesiones porque es importante recordar que el chasis es su propio cuerpo. Las abrasiones y las fracturas traumatológicas son las lesiones más frecuentes.

Los traumatismos en la cabeza son muy comunes en los accidentes de peatones porque la víctima va a ser impulsada fuertemente contra el pavimento. También las fracturas en las extremidades inferiores son frecuentes porque cuando un parachoques de un coche golpea a un peatón, lo hace a la altura de las rodillas.

Para evaluar las secuelas que pueda generar cualquier lesión es fundamental contar con un informe médico. Este documento será esencial para justificar las lesiones sufridas, la rehabilitación y el tratamiento más adecuado para la víctima.

La casuística es muy abundante cuando se habla de lesiones en víctimas de accidentes de tráfico porque hay que tener en cuenta muchos factores, desde la propia persona, el impacto, las secuelas, la pérdida económica, etc… Por ello, es fundamental el asesoramiento de un abogado especializado en accidentes de tráfico.

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